En Palena, corazón de la Patagonia chilena, la rosa mosqueta pinta de rojo los otoños, apareciendo de forma violenta entre maquis y radales, aquí ella es protagonista, admirada y apreciada por todos quienes conocen su valor; el frío imperante en esta zona obliga al fruto a protegerse, aumentando su concentración de vitamina C y de ácidos grasos polinsaturados que le confieren propiedades únicas.
La recolección de fruto se realiza a finales de marzo y principios de abril. Es en esta etapa donde se inicia la aventura de Kalu. La recolección del fruto es manual, y a partir de esta actividad, nace para nosotros la frase que simboliza el espíritu de Kalu.