Kalu significa «hijo» en lengua tehuelche, la denominación surge, porque son los hijos de la tierra de Palena, los encargados de cosechar el fruto de rosa mosqueta desde la pureza de los paisajes silvestres que circundan la cordillera de los Andes en el corazón de la Patagonia Chilena.
Su extracción es en el lugar más austral de Chile y del mundo. A partir de un proceso respetuoso y sostenible, es posible extraer el aceite de las semillas de rosa mosqueta, por un método de prensado en frío, libre de cualquier tipo de solventes y por lo tanto 100% natural. Por esta razón nuestra producción es limitada.